La segunda ronda del XIII Abierto Termas de Río Hondo no decepcionó. Con condiciones climáticas ideales y un campo que sigue premiando la estrategia, Andrés Gallegos firmó una espectacular tarjeta de 66 golpes, trepando a la cima del leaderboard con un total de -12, consolidando su condición de favorito y mostrando una regularidad asombrosa en cada sector del campo.
El escolta inmediato es Jonathan Núñez, quien volvió a entregar una ronda bajo par (70) para ubicarse a tres golpes, mientras que Vicente Sequeira y el joven aficionado Juan Martín Loureiro comparten el tercer puesto con -8. A destacar: el amateur sigue compitiendo de igual a igual con los profesionales, ratificando el gran momento del semillero argentino. Pero si hay una historia que conmovió y captó la atención en la jornada del viernes, fue sin duda la de Oreste Focaccia. El profesional bonaerense, quien había arrancado el torneo con una sólida ronda de 71 (-2), llegó al campo tras una noche difícil. Un fuerte cuadro de faringitis, agravado por el viaje en avión y complicaciones auditivas, lo tuvo al borde del abandono.
“Anoche terminé en el médico. Estaba muy dolorido, se me habían tapado los oídos y no sabía si iba a poder jugar. Pero estoy con antibióticos y salí igual. No podía dejar pasar la chance de seguir compitiendo”, comentó Focaccia tras la ronda.
A pesar del malestar, sacó fuerzas desde lo más profundo y firmó un valioso 75 (+2), que le permitió pasar el corte y mantenerse en competencia con total de par (E) en los 36 hoyos, ubicándose en el puesto 27.
El inicio fue prometedor: birdies en el hoyo 4, 6 y 9 para cerrar los primeros nueve con 35 golpes (-2). Pero el desgaste físico comenzó a notarse en los últimos hoyos, con un tramo final complicado en el 10 y el 13, donde cometió bogeys, para cerrar con 40 golpes en la vuelta.
Más allá del score, el dato sobresaliente es su resiliencia y profesionalismo. En un contexto en el que muchos hubieran optado por priorizar la salud, Focaccia decidió competir, completar su vuelta y seguir adelante en el torneo, demostrando el temple que lo caracteriza dentro y fuera de la cancha.
El sábado se presenta como una jornada crucial. Con el field reducido tras el corte, los líderes intentarán despegarse y consolidarse rumbo al domingo, mientras que nombres como Focaccia buscarán escalar posiciones y cerrar el torneo con buenas sensaciones.
